El algodón de Cotó Roig
Ya tengo conmigo el lienzo de Cotó Roig del que te hablé en esta entrada, fabricado con algodón que cultivaron agricultores de las Marismas de Lebrija, convertido en hilo por hiladores de Ripoll y tejido por tejedores de Navarcles.
El trabajo de tejido es perfecto y la textura es preciosa, con esas motitas oscuras que nos recuerdan las ligeras imperfecciones de lo natural.
Me gustan las historias que hay detrás de las telas, que son las que las convierten en materiales vivos. A veces es una historia pasada, otras vidas vividas a través de las personas que las utilizaron antes. Y a veces, es la historia de su creación, de una idea y un proceso tan bonitos como este proyecto.
¡Que pases un estupendo fin de semana!
Si te ha gustado, me haría muy feliz que lo lanzaras al mundo desde tus redes sociales, usando uno de estos botoncitos 😊 👇
16 Ene, 2015 @ 09:08
Imagino las ganas que tendrás de «meterle mano»…
Tiene una pinta preciosas y el proyecto parece interesante. Manos de principio a fin, bueno y patas por lo que veo también, hay alguien por ahí con cuatro que ha mostrado mucho interés.
Espero que nos vayas enseñando qué vas a hacer con él.
Buen día y estupendo fin de semana, Montse.
26 Ene, 2015 @ 09:06
Pues la verdad es que me impone bastante… ;)
Besos.
16 Ene, 2015 @ 17:21
se nota que disfrutas con tu trabajo, mimando cada materia prima que utilizas, la verdad es que yo adoro tocar algunas telas por su tacto y lo que me transmiten…
besos
26 Ene, 2015 @ 09:05
Sí que disfruto, sí. Lo de mimar la materia prima es parte de la historia de cada pieza ;)
Un beso, Lola.
16 Ene, 2015 @ 20:45
Que inspirador! Me voló la imaginación a las posibles historias de esos lienzos. Gracias! :)
26 Ene, 2015 @ 09:04
Las historias son infinitas…